ELIGIENDO AMIGOS Y AMIGAS
Es importante pensar que cuando nuestros hijos e hijas crecen,
el entorno es el que es, a no ser que seamos una Familia Nómada que nos guste
viajar y trasladarnos de lugar en lugar.
¡Qué claro, no estaría mal de vez en cuando!.
La cuestión es que muchas de esas personas que rodean a nuestros hijos pueden
no estar dentro de nuestros gustos: “Dice muchas palabrotas”, “Es muy mandona”,
“Sus padres no me gustan”….
En fin, cualquier excusa es buena para intervenir
en la elección de amigos y amigas de nuestros hijos e hijas; Poco a poco sin darnos cuenta hemos confundido a
nuestros hijos e hijas, hasta que ya no saben que perfil de amigo deben elegir.
¡Sinceramente!, los niños y niñas acaban juntándose ellos mismos
según es menester y cada uno es egoísta y busca, aunque no nos demos cuenta, su bienestar. Si no lo hacen, debemos marcarle
las pautas de: “Con las personas que estés a gusto y que disfrutes ”. Por supuesto, está la magia de la
transmisión de VALORES y hay que tener
en cuenta que hay que ser buen compañero, escuchar, compartir, no dejarse maltratar, etc.
El párrafo anterior me da a pensar en una pregunta concreta: ¿Debemos pegar al que pega??? (Tema ya expuesto en otro de los artículos) Por supuesto, que como educadora os diré que NO; Hay muchas otras formas de comunicación y debemos quemar todos los cartuchos para que así sea. Pero como Madre, os diré que ganas dan de decir, si te dan!, das! sobre todo con aquellas personas que sabes que acompañaran a tus hijos durante muchos años y que merecen recibir una reprimenda que sus padres no le darán jamás. ¿Hay que pegar?. Mi respuesta: Muchas veces hay que enfrentarse a las personas que te hacen sentir mal y las herramientas para hacerlo pueden ser muchas; Por ejemplo, trabajar en nuestros hijos e hijas la autoestima, la autosuficiencia y que sepan que las personas que tratan mal a los demás, no tienen otras herramientas con las que funcionar, ni otra cosa más importante que hacer en su vida. Seamos imaginativos!!!!
Si esperamos que los demás hagan lo que nosotros esperamos,
volvemos a entrar en una rueda peligrosa y de frustraciones. ¡No esperes que los demás actúen como tú quieres!. Si finalmente consideras
que esa persona no merece tu amistad, ahí sí puedes decidir no estar con esas personas o aceptarlas tal y como son e interactuar en campos comunes. ¡Ojo! decidir "no estar" no es lo mismo que "huir".
Los padres y madres lo pasamos mal cuando nuestros hijos e hijas son
apartados de un grupo, pero… insisto las emociones ¡Ahí están!. Y cuando se refieren a nuestros hijos e
hijas, parece que esas emociones se convierten en más intensas. ¡Debemos
aceptarlas!. Lo importante es que nuestros
hijos e hijas, vayan aprendiendo herramientas
para afrontar las situaciones que van apareciendo en su vida, insisto en éstas herramientas:
- - Saber que los demás no tienen que actuar como nosotros queremos, nuestra actitud ante lo que vemos es la que debemos mejorar.
- - Decidir hacer las cosas sin recibir nada a cambio, ¡Las haces porque te apetece y quieres! ¡Puedes elegir no hacerlas!
- - No dejarse dañar y buscar personas con las que te sientes bien. ¡ Tú eres muy valioso para tí mismo y para los que realmente te quieren! ¡ No lo olvides!
- - Si te sientes enfadado con ciertas personas, diles cómo te sientes y el motivo. Debemos tener en cuenta que hay personas que no saben dialogar, por lo tanto quizá ésta herramienta tiene que ser utilizada siempre y cuando la otra persona sea buena receptora. Hay otras personas que utilizan está información para hacer más daño en la herida,... también hay que tenerlo en cuenta y actuar en consecuencia.¡De los errores se aprende, y tenemos todo el tiempo del mundo para aprender de ello, infinitas veces, hasta que nosotros queramos decir "basta ya"
- - Aprender a decir lo que NO te gusta y lo que SÍ queremos.
- - Hacerle entender a nuestros hijos que siempre hay personas que intentan llevarte a su terreno y pueden elegir si quieren o no hacerlo, asumiendo sus consecuencias. ¡Se puede elegir! ¡ No te sientas obligado!.
Nosotros somos adultos y hemos comprendido que las amistades
van y vienen y que muchas de esas amistades que forjamos siendo niños, hoy han
quedado en nada o todo lo contrario.
No queremos que nuestros hijos estén
solos, pero tampoco podemos venderlos a cualquier precio, me refiero a obligarles a estar con aquellos que no quieren. Dejar que estén con los que ellos han elegido es importante (Eso sí, nosotros debemos comprobar que efectivamente son personas que le benefician y no son peligrosas en su desarrollo como persona). Nuestros hijos son los
que van a convivir con los otros niños y sabe como son, el que a nosotros nos parece encantador, puede que para tú hijo o hija no lo sea.
¡Nosotros no decidimos sus amigos y amigas!
¡Nosotros le facilitamos esas herramientas que pueden utilizar en su búsqueda!
¡Nosotros tenemos que decirles que estamos ahí para ayudarles a resolver sus dudas!
¡Nosotros estamos ahí siempre!
¡Nosotros tenemos que decirles que estamos ahí para ayudarles a resolver sus dudas!
¡Nosotros estamos ahí siempre!
¡Ellos eligen a sus amigos y amigas!.
¡ Nosotros miramos por su Bienestar (y actuamos en consecuencia)!
¡ Nosotros miramos por su Bienestar (y actuamos en consecuencia)!